La costa del adriático en Croacia o la costa dálmata. La verdad es que suena embriagador. Cuando sabes que vas a recorrerla te ves a ti mismo curveando tranquilamente en un paisaje idílico con el adriático a un lado y las montañas al otro. Te dejas llevar a velocidad constante sin tocar el freno, meciéndote de curva a curva.
Luego te despiertas, cojes la moto y, lo único que haces es meterte en el tráfico. Croacia es hoy en día demasiado turístico como para disfrutar de la moto sin salirse de las rutas establecidas. Así que lo que hay que hacer es eso. Salirse, perderse, descubrir pueblos de interior y carreteras como la de Kozica a Makarska, incluyendo la subida al Sveti Jure. Si te vas moviendo desde la costa al interior y viceversa, atravesando la cordillera paralela a la costa cada dos por tres, es cuando te libras del tráfico
El Sveti Jure es el segundo pico más alto de Croacia y la carretera más alta asfaltada del país. Con 1.762 metros, tiene el aliciente de estar al borde del mar. Desde ahí se ve los días claros Italia al otro lado del adriático y Bosnia Herzegovina detrás, toda una revelación.
El 24 de julio es el cumpleaños de Ro. El año anterior estábamos ese día en lo alto del Stelvio soplando las velas, así que éste no tenía que desmerecer. Salimos por la mañana de Mostar en Bosnia-Herzegovina con la intención de llegar a Split. Seguir el cañón del río Neretva hasta la desembocadura, la carretera de la costa, la subida al Sveti Jure, un día repleto de paisajes y buenas carreteras.
El año anterior estábamos en lo alto del Stelvio con lluvia y cuatro grados de temperatura y este año rondamos los 40 grados casi todo el día menos en la subida al sveti, no sé con cual quedarme, mola esto de la moto.
Y para redondear el cumpleaños, bienvenidos a la noche en Split, eso sí que fue un descubrimiento